Perfecto al final de un día ajetreado para relajarse y desestresarse o al final de una sesión de yoga; de hecho, en cualquier momento en que necesites relajarte, también es ideal a la hora de dormir para ayudarte a relajarte y disfrutar de un sueño reparador. Además de oler bien, las investigaciones sugieren que la lavanda puede ser útil para tratar la ansiedad, el insomnio, la depresión y la inquietud, así como para reducir las irritaciones y la inflamación de la piel. Perfectamente perfumada y pesada, la almohada se amolda a la cara, lo que ayuda a aliviar la tensión y relajar los músculos alrededor de los ojos. La almohada también se puede poner en el microondas, la nevera o el congelador y colocarla en los ojos o la frente (¡o en los hombros!